A la
espera del nuevo libro de Megan Maxwell, me he puesto a repasar sus
primeros libros y esta pequeña novela corta, o relato largo de
apenas 64 páginas es una buena muestra de que las cosas sencillas y
bien escritas dan mucho juego.
La
escritora no se detiene en detalles y detalles que acaban agotando o los “tira-y-afloja”
entre los protagonistas. Directamente te muestra los protagonistas y
cuando quieres darte cuenta te encuentras sumergido en la vorágine
de la acción… No puedes abandonar los ojos del relato hasta que lo
acabas.
Vale,
muchos dirán que el final es predecible; pero está tan bien
encuadrado, que te pilla por sorpresa y de repente ves que todo
encaja a la perfección y da comienzo a algo ya narrado.
Sí, es
un chivatazo gordo, pero seguro que no sabréis de qué hablo hasta
que lo leáis. Así pues, buscad este e-book y leedlo porque es
breve, claro y te engancha más que el azúcar a las moscas.
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